Aprovechando la coyuntura por el Primer Congreso Nacional de la Papa, los alumnos del Instituto Peruano de Gastronomía (IPG), CENFOTUR y Professional Air acudieron a Huancayo en búsqueda de trabajar el concepto de Investigación y el diseño de la ruta gastronómica de la papa nativa en el valle Mantaro. Cerca de cien estudiantes de cocina gozaron de una experiencia magnífica, recomendable al cien por ciento para todos los viajeros. Si se dispone de tiempo y hay ganas de pasar un buen rato, imitar esta travesía es una experiencia extraordinaria.
La ruta de los alumnos
Viajar es siempre grato, pero hacerlo en tren es una experiencia inolvidable. Los distintos alumnos de gastronomía que acudieron al congreso de la papa tuvieron la oportunidad de viajar a Huancayo mediante el mítico tren que une a Lima con la capital de Junín. Este parte desde la estación de Desamparados, a espaldas del Palacio de Gobierno, y aprovechando la ocasión, tuvo la particularidad de contar con un sobrenombre. Se le denominó “El tren del sabor y del saber”, y albergó, además del entusiasmo y las ganas de los estudiantes, distintos aperitivos y bocaditos que ellos mismos prepararon en un vagón especial del tren, y que fueron degustados por toda la tripulación. Todos los platos fueron hechos a base de papa, panes y distintos productos típicos de la zona del valle del Mantaro. Este tren permite la contemplación de paisajes impresionantes en una ruta única. Además, cuenta con asientos muy cómodos y con distintos vagones entre los que destaca el bar, un espacio en el que se puede hasta bailar.
La ruta de los alumnos

Una vez en Huancayo, luego de apreciar el contraste mágico de su

Conociendo las bondades del valle

Concepción es conocida como la “capital del pan”, y queda a tan solo 30
Como parte de la ruta del pan es posible visitar ferias que veneran el producto y en las que destacan las productoras de pan vestidas con atuendos típicos como la Concepcionina o la Montacanastas. Son imprescindibles también las visitas a las panaderías artesanales y al pueblo de Ocopa.
La ruta es posible

Apogeo de la cocina peruana
La gastronomía del Perú merece ser tratada a la altura de su reconocimiento mundial. Es quizás el único motivo en el que hay consenso entre los peruanos. Estamos orgullosos de nuestra cocina. Pero su apogeo y fama no deben quedar como un simple boom, y el deseo de engrandecerla no debe permanecer en la gama de las buenas intenciones. La gastronomía viene acompañando el fortalecimiento del turismo en el país, y la elaboración de un binomio que los envuelva de manera efectiva es una tarea urgente. En ese contexto la creación de rutas gastronómicas aparece como un ideal punto de partida. Al más puro estilo de países como España, y su reconocida “Ruta del Jamón Ibérico”, o sin ir muy lejos, Chile y su “Ruta del vino”, el Perú está en condiciones de ofrecer un producto que venere nuestra mágica geografía y que conquiste los paladares turísticos con innumerables platos.